jueves, 31 de mayo de 2012

Marruecos. Puente de mayo. 1-mayo-2012

1-mayo-2012

“Chauen.- La ciudad fue fundada en 1471 en el emplazamiento de una pequeña población bereber. Su población original estuvo compuesta sobre todo por exiliados de al-Ándalus, tanto musulmanes como judíos, razón por la cual la parte antigua de la ciudad tiene una apariencia muy similar a la de los pueblos andaluces, con pequeñas callejuelas de trazado irregular y casas encaladas (frecuentemente con tonos azules). Sus habitantes nativos se parecen físicamente, por lo general, también más a los habitantes del otro lado del estrecho de Gibraltar que a la mayoría de los magrebíes. Chauen está construida sobre un pequeño valle. La parte más antigua de la ciudad crece hacia lo alto de la montaña, y en el punto más alto se encuentran los manantiales de Ras al-Ma. El centro de la ciudad es la plaza de Uta al-Hammam, en la que se encuentra la alcazaba y una mezquita con una torre de base octogonal. Otro punto emblemático de la ciudad es la Mezquita de los Andaluces. La ciudad nueva se ha construido más abajo de la ciudad antigua.
Chauen fue durante siglos una ciudad considerada sagrada, donde se prohibía la entrada a los extranjeros. Por esta razón se ha mantenido con pocas alteraciones toda su fisonomía medieval. Los cambios en la estructura urbana y poblacional de Chauen son muy recientes. Fueron las tropas españolas las que abrieron Chauen al tomar el control de toda la zona norte de Marruecos para instaurar el protectorado concedido por la Conferencia de Algeciras (1906) y definido por el tratado hispano-francés de 1912. Cuando los españoles llegaron, la ciudad tenía una importante población judía sefardí que hablaba judeoespañol. Chauen fue una de las principales bases del ejército español, y en esta ciudad se arrió la última bandera española en 1956. Como en otras ciudades que pertenecieron al protectorado español, gran parte de sus habitantes sabe hablar español. Chauen estuvo bajo control de la República del Rif y en donde estuvo a punto de producirse otro desastre de las tropas españolas a la hora de retirarse debido a la gran ofensiva de los rifeños.” (FUENTE WIKIPEDIA)
Tras un buen desayuno en la plaza de Uta al-Hammam, paseamos de nuevo tranquilamente por este bonito pueblo, nos encontramos casualmente con una manifestación que celebra y reivindica el primero de mayo como día de los trabajadores y por último compramos unos souvenir no sin antes negociar el precio, esto aquí, como en todo Marruecos, es obligatorio. A las 13:00 dejamos el hotel y marchamos de regreso a Tanger para tomar el barco. La N2 hasta Tetuan transcurre por unos paisajes realmente bellos, todo verde, parecía que estábamos en el norte de España. Como llegamos con suficiente antelación decidimos tomar el barco anterior al nuestro, lo hacemos directamente sin llegarnos a la oficina de la compañía naviera, seguro que allí nos hubieran cobrado algo, en el paso de la frontera antes de embarcar por poco caemos en la trampa de la picaresca marroquí, dos individuos con una credencial, no se sabe muy bien de que, nos indican (uno a Sergio y otro a mi) que nos adelantemos con las motos (en realidad no había nadie delante) y les entreguemos los pasaportes, querían hacernos los papeles que ya llevábamos rellenos, tanto Ela, Sergio y May caen en el engaño y piensan que son policías de paisano, a los dos nos piden dinero como ayuda por, en realidad, no hacer nada, evidentemente no accedemos a su petición diciéndoles que ya no nos quedaba ni un dírham.
Finalmente tras menos de una hora de travesía llegamos a Tarifa aún de día, la vuelta hasta Málaga y Torre del Mar decidimos hacerla más rápida por la autopista. En definitiva ha resultado un viaje muy bonito y entretenido a pesar de la incidencia del hotel la primera noche por culpa de “lastminute” y de que el tiempo no ha estado de nuestra parte.

CONTINUARÁ CON EL PRÓXIMO VIAJE…
















lunes, 28 de mayo de 2012

Marruecos. Puente de mayo. 30-abril-2012

30-abril-2012
Dejamos Fez y marchamos hacia Chefchauem, parece que hoy no nos mojaremos porque amanece el día con un cielo totalmente limpio de nubes. Seguimos el track que nos llevará hasta nuestro destino siguiendo principalmente las nacionales N4 y N13, no se muy bien porque motivo, a la altura del embalse de Sidi Chahed, el camino a seguir se sale de la N4, continuamos por él y de pronto observo que la vía que debemos tomar a la izquierda es una pista sin asfaltar, le digo a Sergio en principio de evitarla siguiendo la carretera recta para ver si encontramos alternativa pero esta nos conduce de cabeza al agua, así que regresamos y optamos por tomar el camino sin asfaltar y en caso de verlo complicado nos daríamos la vuelta, al final lo que ocurre en estos casos, la pista también desaparece y nos encontramos en medio de un sembrado, la cabezonería mía hace que irremediablemente Ela y yo terminemos en el suelo, bueno, más bien solo se cayó la moto, porque íbamos despacio y nos dió tiempo de saltar. Después de esto y viendo que el terreno no mejoraba decidimos dar la vuelta y regresar a la N4, en realidad el track nos había llevado por un atajo en muy malas condiciones. El resto del trayecto lo hacemos sin más incidencias, las N4 y N13 son bonitas para viajar en moto, con muchas curvas y unos preciosos paisajes. Chefchauem nos recibe con lluvia, ¡vaya!, creíamos que hoy nos íbamos a librar, pero afortunadamente no arrecia mucho. Finalmente llegamos hasta la plaza del Hotel Parador donde dejamos las motos y con la ayuda de dos chicos llevamos las maletas hasta nuestro hotel situado en la zona peatonal de la medina no muy lejos. El hotel, Dar Mounir, está muy bien ubicado aunque las habitaciones son muy pequeñas, con dificultad conseguimos entrar nosotros y las maletas. Tras un breve descanso decidimos primero comer en la plaza y después pasear tranquilamente por esta bonita localidad.






























lunes, 21 de mayo de 2012

Marruecos. Puente de mayo. 29-abril-2012

29-abril-2012

Fez (فـاس [Fās], en árabe, Fès en francés) es la tercera ciudad de Marruecos, después de Casablanca y Rabat, con una población de 946.815 habitantes según el censo de 2004 (gentilicio: fasi o fasí). La ciudad de Fez es la capital del Islam en Marruecos, de la región de Fez-Bulmán y de la prefectura de Fez. Está situada en la región antiguamente llamada Hispania Nova. Sus coordenadas geográficas son 34°3′10″ N 4°58′58″ O. Es una de las cuatro ciudades llamadas imperiales junto a Marrakech, Mequinez y Rabat. En Marruecos está considerada como el centro religioso y cultural del país. Su universidad, famosa por el estudio del árabe y la religión musulmana, la convierten en punto de paso de un gran número de estudiantes marroquíes. La ciudad se divide en tres zonas, Fez el-Bali, la zona antigua, dentro de las murallas, Fès el-Jdid, la zona nueva, donde se encuentra la Mellah, el barrio judío, y la Ville Nouvelle (Villa Nueva), la zona francesa en el noroeste de la ciudad. La medina de Fez el-Bali (antiguo Fez), la mayor de las dos de la ciudad, es la mayor zona peatonal del mundo, y fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1981. Cuenta con calles laberínticas y al mismo tiempo es uno de los mayores emplazamientos medievales que existen actualmente en el mundo, las puertas y murallas que le rodean potencian su magnificencia.” (FUENTE MIKIPEDIA).
El hotel donde nos hospedamos (Jardin Chrifa) está en la entrada de Fez el-Bali, situación privilegiada para visitar quizás la zona más interesante de Fez, después de todos los avatares de anoche tuvimos mucha suerte al encontrarlo, es acogedor y con una bonita decoración. Anoche, mientras Sergio y yo estábamos en la recepción del hotel Riad El Yacout,  Ela y May no perdieron el tiempo, pues no solo vigilaban las motos sino que también se encargaron de negociar y contratar un guía que nos enseñara el laberinto de la antigua medina, sin un guía es imposible adentrarse sin perderse en este inmenso mundo.
Tras un rico y suculento desayuno en el precioso patio del hotel, ya con las pilas bien cargadas nos disponemos a recorrer la antigua medina. A las 10 en punto, cosa extraña por la puntualidad, aparece nuestro guía como ya anoche pactaron las chicas y nos ponemos en marcha. Pasear por la medina es adentrarse en todo un mundo de sensaciones, que embriagan a cualquier viajero pudiendo incluso llegar a marear,  recorremos un sinfín de callejuelas angostas para pasar por un gran zoco de alimentación típico marroquí, no apto para gente escrupulosa, seguimos por un mercado de artesanías múltiples, bronce, plata, cuero, ropa, …, alguna que otra mezquita, una antigua madraza (escuela religiosa islámica) bonita pero muy abandonada, alguna tienda de perfumes y esencias naturales y quizás unos de los sitios más destacados: los cuartos de curtidores de piel, una de las principales atracciones de Fez, que conserva toda la esencia de antaño. Llegar hasta la zona de los curtidores no sería fácil si no fuéramos con guía, se encuentra escondida entre las bulliciosas calles, muy cerca de la mezquita principal de la ciudad considerándose la zona artesanal por excelencia. Aquí se tiñen y secan las pieles con las que se harán los artículos que se venden en Fez y en muchas zonas de Marruecos. No en vano, Fez puede presumir de tener la mejor piel del país. Pese al olor que desprende el lugar, en ocasiones puede provocar casi el vómito, la visita de estos cuartos merece la pena, ofreciendo un paisaje de vivos colores que se quedan en la retina. Los asnos trasladan hasta aquí las pieles “frescas” de los animales muertos, para someterlas a un lento y costoso proceso en el que la tiñen de varios colores, siguiendo los pasos como se hacía varios siglos atrás, trabajo exclusivo de los hombres que entran en los hoyos con tinte y de pie y descalzos, van amasando la piel. En general los turistas visitamos la zona desde lo alto, en los balcones de las tiendas. El guía antes de entrar nos ofreció un ramillete de yerbabuena para que al colocarlo sobre la nariz pudiera hacer más soportable la visita, aunque realmente nos lo había pintado tan mal que el mal olor no nos sorprendió tanto.
            Tras la larga visita al corazón de Fez regresamos al hotel agotados, descansamos un rato antes de continuar, ya por nuestra cuenta, visitando la ciudad moderna, Ville Nouvelle (Villa Nueva), para ir allí teníamos que buscar un taxi, aquí nos surge un pequeño problema, la mayoría no están autorizados a montar cuatro personas (los grandes no circulaban habitualmente donde nos encontrábamos), así que solo nos quedaba la opción de coger dos, algo que no les agradaba mucho a Sergio ni a May porque no se fiaban de perderse solos en esta gran urbe, u optar por buscar un “taxi particular o ilegal”, elegimos esta segunda opción, más emocionante, por supuesto con el previo regateo preceptivo, casualmente el techo del coche que tomamos estaba empapelado con una bandera del Partido Popular (PP), estos ponen cualquier cosa por no mostrar los desconchones del viejo vehículo. Lo primero que hacemos es buscar un restaurante donde comer algo, estábamos desfallecidos, después paseamos tranquilamente por una gran avenida que atraviesa esta zona nueva. De regreso, ya sin pensarlo, cogemos un “taxi ilegal” y en la plaza junto a nuestro hotel nos tomamos nuestro primer té moruno, ¡qué bueno!, antes de volver al hospedaje.