CRÓNICA YUCATÁN. 5-diciembre-2011. Fin

5-diciembre-2011

Nos levantamos tarde algo resacosos de la marcha de anoche, a las 12 nos retiran la seña de identidad del hotel (pulserita), almorzamos y esperamos hasta las 15:00 que vendrán a recogernos para llevarnos al aeropuerto, la verdad es que se hace pesado y más aun cuando nos recogen los primeros y estamos dos horas dando vueltas cogiendo a más gente de otros hoteles. En el aeropuerto fue todo rápido tras pagar los 50 euros por salir del país, ¡menudo morro!, el avión sale puntual a las 20:00, solo nos quedan nueve horas y media de vuelo hasta España. En Madrid tomamos el metro hasta la estación de autobuses y casi con el tiempo justo para almorzar nos subimos en el autobús que nos llevará a Málaga donde llegamos a las 23:00, ya hora española, allí nos recoge Chiqui, hermano de Ela, y casi a media noche terminamos la larga jornada de hoy.

CONTINUARÁ CON LA CRÓNICA DEL SIGUIENTE VIAJE…

CRÓNICA YUCATÁN. 4-diciembre-2011

4-diciembre-2011

Mañana regresamos a España, aún no habíamos cenado en el restaurante típico mexicano del hotel donde sirven a la carta, así es que lo primero es reservar para esta noche, tras el desayuno decidimos dar la última vuelta por Playa de Carmen para comprar algunos regalos. En la playa continua el fuerte oleaje de ayer por lo que volvemos pronto al hotel, allí nos encontramos de nuevo con los sevillanos con los que tomamos unas cervezas. Tras la cena nos presentan al que será a partir de ahora el “tito Raul”, bilbaíno que viaja con su mujer e hija, “viajante y figura donde los haya”, todos juntos , incluido el francés, los portugueses y algunos foráneos más, nos pegamos la “gran marcha del viaje” en la discoteca Pachá del hotel, hubo lucha de sumo entre nuestro tito y un tipo, también francés, que iba con su esposa enorme (de buena) y grande, a los sevillanos, con los gemelos a la cabeza, se les ocurrió probar la flotabilidad y tiro a la piscina de las hamacas, terminaron también en el agua hasta las figuras gigantes de plástico de un ajedrez, por último aparecieron los de seguridad del hotel, creo que no nos echaron porque el director también era sevillano y ya lo conocíamos.

CRÓNICA YUCATÁN. 3-diciembre-2011

3-diciembre-2011

Tras el desayuno de nuevo participo en el concurso de tiro con rifle, en esta ocasión quedo en segundo puesto, mi máximo rival de ayer (típico vaquero americano) estaba hoy muy fino. Nuestro hotel tiene preparada para esta jornada una fiesta en la playa, con paella incluida, sin muchas cosas más que hacer nos dirigimos allí sobre las 11:30, cuando llegamos nos encontramos que la paella estaba ya casi lista, en el hotel no hay muchos españoles y desde luego las horas de comer no son las mismas. Actúa también un grupo cubano y los animadores sacan a la gente a bailar, nosotros practicamos un poquito de merengue y bachata, sobre las 12 y viendo que la paella se acababa nos tomamos unas tapas con poca hambre, no estaba mal. En el mar ondeaba hoy bandera roja por el fuerte oleaje así que no pudimos probar de nuevo las cálidas aguas del Caribe. Ya por la noche conocemos a los sevillanos, menuda panda, curiosamente también hay dos gemelos, como los de León de los primeros días, pero al contrario que estos, parecían la reencarnación del mismísimo diablo, que malos eran, ellos y sus compis, nos tomamos algunas copas antes que se marcharan a la discoteca Coco Bongo en Playa del Carmen. Más tarde en el bar frente al escenario conocemos a una pareja de portugueses con los que hablamos un rato y a un francés “fanático deportista” con él estamos hasta altas horas de la noche, lo curioso es que apenas sabe español ni nosotros francés pero aún así entablamos una entretenida y larga conversación.

CRÓNICA YUCATÁN. 2-diciembre-2011

2-diciembre-2011

Ya sin coche, parece que nos han cortado las alas, tendremos que continuar con uno de los siete pecados capitales, la gula, consumo excesivo de comida y bebida. Esto no llega a mermar mis habilidades para disparar con rifle de balines y consigo en el hotel el primer premio de un pequeño juego, “donde pongo el ojo…” (es que no tengo abuela). Visitamos el Riu Tequila, el más grande de todos, donde almorzamos. Pensamos que, después de todo, el hotel donde nos hospedamos es el más tranquilo y acogedor, contando al mismo tiempo con todos los servicios de los demás. Por la noche me toca recoger el premio, un diploma, y tengo que subir al enorme escenario, ¡qué vergüenza!, menos mal que no tuve que bailar la machacona canción del hotel cuyo estribillo era: “uno, dos, tres, LUPITA…, uno, dos tres, LUPITA…” desde luego no se han tenido que exprimir mucho la cabeza

CRÓNICA YUCATÁN. 1-diciembre-2011

1-diciembre-2011

Ruta: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2316559

Los días que nos quedan los dedicaremos al típico viaje TI: comida, bebida, playa; comida, bebida, paseos; comida, bebida, fiesta y mas comida y bebida, ¡ufffff, menos mal que no nos quedaban muchos días!, lo aviones de vuelta seguro que siempre regresan con sobrepeso. Hoy afortunadamente aun nos queda el coche, debemos entregarlo por la tarde, así que optamos por visitar una de las bonitas playas de la zona, Akumal, en ella es típico hacer snorkel para ver los peces pero realmente no es necesario, nadan junto a ti sin ningún miedo y se ven sin necesidad de sumergirte. El sol era abrasador por lo que buscamos la sombra de una buena palmera en la misma playa, no teníamos intención de volver negros renegros. Entregamos el coche temprano y nos queda tiempo de volver al Riu Yucatán donde después de una pequeña lidia, el toro de la puerta tentaba a hacerlo, comemos en su bullicioso restaurante y tomamos alguna que otra cerveza junto a su enorme piscina pegadita a la playa. Por la noche asistimos al espectáculo de nuestro hotel Lupita y cae más de un cubata, en realidad no hacían mucho efecto, eran como el agua.

CRÓNICA YUCATÁN. 30-noviembre-2011

30-noviembre-2011

Ruta: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2364967

Volvemos tranquilamente hasta el hotel Riu Lupita, en él nos encontramos que los turistas, como nosotros, ya no son los mismos, la mayoría están siete días, tan solo vemos a Alejandro (el alemán) esperando el autobús que lo llevaría al aeropuerto de regreso, estaba como una gamba, se había pasado un poquillo con el sol, sus colegas de León ya se habían marchado el día de antes, nos comenta que han llegado cinco sevillanos que parecen son la bomba, aun nos quedan cinco días y tendremos ocasión de conocerlos. Como no era muy tarde decidimos dar una vuelta por Playa de Carmen y por otro de los Riu de la zona, el Yucatán, enorme.